Hoy se cumplen veinte años, ¡20!, de la publicación de Nevermind,el disco que sacó a la luz de lo que llaman mainstream («lo que escucha todo el mundo») un estilo del punk-rock independiente que, nos guste más o menos, dejó huella en la generación de los actuales treintañeros. Este disco y, fundamentalmente, Nirvana, con el épico-trágico final de su idolatrado líder, Kurt Cobain, rondaron por los pasillos de todos los institutos de aquellos primeros noventa.
20 años que parecen estar a la vuelta de la esquina. 20 años y el disco y sus canciones siguen vigentes, sin que a penas hayan envejecido. Curioso. Si nos situamos en 1991 y miramos veinte años atrás, a 1971, el año en que se formó Queen, Kraftwerk publicó su primer disco, Bowie y Led Zeppelin empezaban a despegar, y solo un año después de la separación de los Beatles, musicalmente parecería una eternidad. En esos 20 años surgió el punk, se desarrolló el rock sinfónico, explotó la música electrónica, se vivió el ascenso y caída del glam, nació (para quedarse) la música disco... además, aparecieron gigantes de la música comercial como Michael Jackson, Madonna, U2...
Sin embargo, y siempre desde el punto de vista masivo-comercial, en estos últimos 20 años quizá la utilización del hip-hop (que nació en los 70) y sus evoluciones electrónicas han sido de las pocas novedades que han aflorado dentro de la música «que todos escuchan».
No sé, quizá es la percepción de un «treintón» que no sabe todo lo que debe ni está a la última, pero lo único que veo es a los mismos perros con distintos collares: tres o cuatro grandes vías musicales, para los tres o cuatro grandes públicos, que se repiten sin cesar, cambiando el envoltorio y confiando en que los nuevos consumidores no hayan escuchado lo que ya se ha hecho antes.
¿No será que la clásica fórmula del rock'n'roll con sus cuatro acordes está llegando a su fin? Quién sabe, a lo mejor en este ambiente de crisis y hartazgo en el que estamos, similar al que se vivió en Estados Unidos cuando salió Nevermind, de pronto aparezca un disco con un líder guapo y carismático que saque a la luz una manera de hacer música que ya se lleve haciendo mucho tiempo y con la que se pueda identificar "todo el mundo". Quizá necesitemos compensar tanta crisis con un poco de litio...
P.D. No he podido resistirme a poner esta versión de la portada del disco...
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